Fernanda Namur
Nací en contra de mi voluntad en Santiago de Chile, criada ahí mismo como mejor pudieron mis papás y, probablemente, muera allí también, a menos que a este libro le vaya muchísimo mejor de lo que espero. Psicóloga de profesión, vegana por elección y melancólica por default. Mis cosas favoritas en esta vida son mi compañera peluda Cuca María, la marraqueta con palta y el café cargado con leche de soya y cantitades aborrecibles de endulzante, en ese orden.
Un poco de alegría, una pizca de tristeza y un toque de melancolía.
Conéctate como nunca antes con la comida y los relatos de Fernanda Namur.
No es difícil desenterrar recuerdos a través de la comida; las sopas que preparaban nuestras abuelas, los postres que compartíamos con nuestras amigas, lo que estábamos comiendo cuando nos rompieron el corazón. A veces los ingredientes que utilizamos son parte de nuestra rutina, pero olvidamos que también son parte de nuestra identidad. ¿Cuántos platos hemos dejado de disfrutar solo porque nos hacen volver a un momento en particular? ¿Cuántos comemos específicamente para retroceder el tiempo y revivir una experiencia?
Con esta reconfortante selección de relatos, Fernanda Namur –conocida en redes sociales como @lachanchavegana– logra transmitir la nostalgia, la melancolía, el cariño y la desolación que pueden acompañar a distintas preparaciones, porque, a veces, comer significa algo más que un simple acto de supervivencia.
No es difícil desenterrar recuerdos a través de la comida; las sopas que preparaban nuestras abuelas, los postres que compartíamos con nuestras amigas, lo que estábamos comiendo cuando nos rompieron el corazón. A veces los ingredientes que utilizamos son parte de nuestra rutina, pero olvidamos que también son parte de nuestra identidad. ¿Cuántos platos hemos dejado de disfrutar solo porque nos hacen volver a un momento en particular? ¿Cuántos comemos específicamente para retroceder el tiempo y revivir una experiencia?
Con esta reconfortante selección de relatos, Fernanda Namur –conocida en redes sociales como @lachanchavegana– logra transmitir la nostalgia, la melancolía, el cariño y la desolación que pueden acompañar a distintas preparaciones, porque, a veces, comer significa algo más que un simple acto de supervivencia.