Madrileño, calipédico, dromomaníaco, lector voluntarioso y escritor ocasional, los atascos del nudo de Manoteras y las esperas en aeropuertos y estaciones de tren le han permitido profundizar en sus enciclopédicos conocimientos inútiles.
Vivió y sobrevivió a la movida madrileña desde dentro del inframundo cultureta: es fundador del Festival de Otoño de Madrid de donde egresó para pisar las moquetas del Instituto Nacional de Artes Escénicas y l...